Un aposito hidrocoloide. Seguro que la mayoría hemos tenido alguna vez un contratiempo de menor o mayor compromiso con nuestro mejor amigo, por una pequeña herida, un desgarro importante o un mordisco en una pelea con otros caninos. Es por eso que debes tener a la mano un apósito hidrocoloide.
Después de prestar el apoyo médico, debemos acudir siempre al experto para una revisión general del perro o gato y de esas heridas en particular.
Los apósitos hidrocoloides están formados por una capa de material creador de gel pegada a una película semipermeable o a una espuma de apoyo. La capa de gel consta de una matriz adhesiva que contiene una combinación de materiales absorbentes como carboximetilcelulosa sódica, pectina y gelatina.
El aposito hidrocoloide resultante es absorbente y autoadhesivo, incluso en condiciones de humedad, Aunque diferentes apósitos hidrocoloides pueden parecer similares, sus habilidades de manejo de los límpidos pueden diferir marcadamente. Muchos apósitos hidrocoloides están disponibles en una variedad de formas, tamaños y grosores.
¿Cuándo colocarle un apósito hidrocoloide a mi perro?
Debes tener en cuenta en que estado se encuentra la herida de tu mascota, una vez chequeada vamos a continuar a colocárselo. Si la herida es profunda y amerita una sutura no debes colocarle un aposito hidrocoloide. Esto se le coloca cuando la herida es fuerte, pero se mantiene superficial. Para esto hay que tener en cuenta que tiene que son tres capas:
Capa primaria: Esta es una capa que se debe colocar especialmente y directamente sobre la herida de tu mascota y debemos tener mucha delicadeza. Este apósito va a permanecer en contacto con la herida y tu mascota estará en constante movimiento, esta se puede emplear para favorecer el desbridamiento, aporta medicamentos o formar un sello oclusivo.
Puede ser adherente o no adherente, en función de que los tejidos de la herida peguen. En principal intentaremos que esta capa no vaya a ser adherente, especialmente heridas de granulación.
Capa secundaria: tiene su función fundamental será la de absorber todos los exudados de la herida, así podremos evitar que se acumulen en ella. Su primera elección va a depender principalmente de la cantidad y los tipos de exudados presentes en tales heridas, debemos recordar que el exceso de exudados en la herida es muy dañino. La principal misión será controlar el exsudado, es decir, trataremos de manteros en sus niveles óptimos y normales.
También podría ejercer una función protectora antes algunos traumas pequeños. Debe tener un grosor adecuado para que absorba lo suficiente y debe tener la presión necesaria para disminuir los espacio que quedan muertos.
Capa terciaria: Esta capa básicamente sirve para hacer soporte a las otras dos capas a las que esta sujetando. Se suelen utilizar unas vendas de gasa, hay que prestar una delicada atencion a la porosidad de esta ultima capa, ya que va a permitir la entrada tanto la entrada como la salida de cualquier bacteria, en especial a las extremidades que son las que tienden a mojarse. También puedes cubrirlo con vendajes o férulas en el caso de que necesite inmovilización adicional. Es por eso que el aposito hidrocoloide es necesario.
¿Qué sería bueno que tuviéramos en el botiquín de nuestro can?
– Guantes y tijeras
– Apósitos, vendas y cinta adhesiva
– Licor, yodo (Betadine) y peróxido de hidrógeno
– Limpiador (vaselina o limpiador de coco)
– Termómetro
– Disposición de suero fisiológico
Es necesario tener un botiquín de primeros auxilios para tu mascota, ya que a la hora de una emergencia sabes donde encontrar todo lo necesario. Es muy importante que tengas un aposito hidrocoloide en tu kit ya que no sabes en qué momento la puedas necesitar.