Cunas para perros

Es usual considerar a nuestras mascotas como un miembro más de nuestra familia y por eso buscamos consentirlos y hacerlos sentir bien. Ya sea comprándoles su comida favorita, un juguete o en este caso una cuna para que descansen y se sientan más cómodos.

Existen camas y sofás para perros de igual modo, pero el término cuna o moisés tiende a referirse a accesorios de descanso acunados o resguardadores.

Si lo que queremos es brindarle a nuestro perro un espacio propio en nuestra casa, esta debería ser nuestra mejor opción. Hay diferentes tipos de cunas y cada una se utiliza para un caso en específico. Recordemos que cada perro tiene sus exigencias propias, dependiendo de su fisionomía, su manera de ser o su edad.

Tendremos que tener en cuenta todos estos factores, incluyendo las facilidades para asear la cuna, para escoger una cuna ideal que se adapte a nuestras necesidades y las de nuestras mascotas.

¿Para qué sirven las cunas para perros?

Una cuna para perro es un mueble especialmente diseñado para nuestras mascotas y sirven para que descansen. Pero sobre todo sirven para que tengan en nuestra casa un espacio propio que dominen a su antojo y en el que no necesiten de nuestra aprobación para subirse. De este modo les crearemos un patrón que consiste en generarles un espacio propio donde descansar y así teóricamente no necesitarán de nuestra cama o nuestros muebles de la sala para hacerlo. No será fácil al principio, sobre todo si son cachorros, pero con un poco de disciplina de nuestra parte se puede lograr.

Nuestro perro al tener una cuna y un espacio propio se sentirá resguardado y protegido, haciendo de su espacio un refugio para cuando tiene miedo o se siente ansioso. Al tener un lugar donde refugiarse sentirá menos ansiedad o estrés y por ende será más saludable. Las cunas también sirven como resguardo para los climas fríos pero esto dependerá de los materiales con los que esté hecha la misma.

También existe el caso de perros que ameritan un descanso más profundo ya sea por su edad o porque tengan alguna enfermedad que los condicione a  descansar más. Esta solución es muy útil para ellos y para nosotros. Tengamos en cuenta que cuando un perro tiene mejor calidad de vida, como todo ser vivo, es más feliz, y seguramente al ser más feliz ellos, seremos más felices nosotros.

Tipos de cunas para perros

Existen varios tipos de cunas para perros y la que escojamos dependerá sobre todo del dinero que queramos invertir en ellas.

Cunas de plástico

Este tipo de cunas están hechas de plástico y existen de distintos tamaños, son resistentes y se usan más que todo para los canes que les gusta mordisquear bastante. Para mejor confort de nuestro perrito, se recomienda adquirir un cojín con funda extraíble que encajaremos dentro de la superficie plana de nuestra cuna.

Cunas de mimbre

Estas cunas más que nada son usadas para razas pequeñas y de edades avanzadas, lo que nos garantizará que no les dé por mordisquear este material. Normalmente los perros jóvenes o cachorros son los que tienen esa tendencia a mordisquear todo, lo hacen por instinto y por su desarrollo, así que no vale de nada reprenderlos, pues lo van a seguir haciendo. La idea es tampoco fomentar esta actitud, así que no les demos razones para hacerlo. Y adquirir una cuna para este tipo de perros de un material como este que sea irresistible para sus mordidas, tampoco es la idea.

Estas cunas también,  al igual que las de plástico, se completan con un cojín que iría dentro de su estructura y donde el perro reposará.

Se recomendaría su uso para climas calurosos ya que por su forma y manufactura suelen ser cunas muy frescas y que permiten la renovación del aire. Esto evitará también malos olores. Sin embargo no quiere decir que no haga falta que se asee regularmente.

Cunas de tela o lana con relleno

Estas cunas son las más famosas por su estructura y comodidad. Son ideales para el descanso pues no cuentan en su confección con ninguna estructura rígida. Por eso son las más comerciales y puedes encontrar un montón de modelos en el mercado. Estas suelen ser más útiles para los climas fríos o la estación invernal.

¿Cómo escoger la mejor cuna para mi perro?

Ante todo lo primero que debemos tomar en cuenta antes de hacer una compra por una cuna para nuestro perro es el tamaño de su cuerpo o sus dimensiones físicas. Muchas veces vemos en casas cunas para perros donde los caninos prácticamente quedan justos en el espacio, no permitiendo que el perro adopte una posición natural de descanso, y que a la larga puede acarrearle problemas vertebrales u óseos. Por otro lado, si la cuna no les es cómoda para su descanso, instintivamente van a buscar de nuestra cama o nuestros muebles para cumplir con dicho descanso.

De igual forma también tengamos en cuenta lo pesado y robusto que pueda llegar a ser nuestro perro. De ser muy pesado, lo ideal es elegir una cuna con colchón con material viscoelástico. Este material evita que el colchón de nuestra cuna se deforme cuando el perro se pose encima; lo hará sentir más cómodo y notaremos la diferencia.

También debemos tener en cuenta cuánto podemos pagar por una cuna para nuestro perro. Existen actualmente en el mercado infinidad de opciones para escoger. Pero sin lugar a dudas, lo que si no debería faltar en la cuna para nuestros perros es la posibilidad de desenfundar el colchón, para que podamos asearlo y lavarlo regularmente.

Por otro lado, si nuestro perro es cachorro o es mayor y tiene problemas de incontinencia, lo ideal sería adquirir una cuna hecha con materiales impermeables para que así sea mucho más fácil su limpieza.

Y siempre recordemos que nunca va a ser un gasto innecesario una cuna o cama para nuestros perros, ya que los haremos sentir más importantes y más integrados a nuestro núcleo familiar. Se sentirá más feliz y será un perro más descansado y saludable.